
El estilo de braza, también llamado "pecho", es quizás el más antiguo de los estilos de natación. Junto con el estilo crol, es uno de los estilos más populares debido a su comodidad de desplazamiento.
También es denominado "estilo rana" por la similitud con el nado de estos anfibios.
La braza es el primer estilo que aprenden muchos nadadores ya que es un estilo tranquilo, agradable y el más lento de todos los estilos. Sin embargo, es el estilo cuya técnica cuesta más de dominar, porque requiere una excelente coordinación de movimientos.
A pesar de que es el estilo más lento de los cuatro y uno de los más difíciles de aprender técnicamente, la braza cuenta con algunas características positivas con respecto a otros estilos, algunas de las cuales son:
• Mejor capacidad de orientación visual y auditiva
• Buena posibilidad respiratoria
• Movimientos simétricamente racionales que requieren poca fuerza y una gran autonomía de nado, entre otras.
Como ya se ha dicho, la braza es el más lento de todos los estilos. Esto se debe a que en la etapa final del movimiento de brazos o piernas, la recuperación, se realiza casi en su totalidad bajo el agua, y esto significa un considerable freno o resistencia al avance.
La braza está experimentando cambios de estilo a un ritmo mucho más rápido que los demás. Hasta hace relativamente poco tiempo la braza se nadaba manteniendo el cuerpo más o menos plano (horizontal), con las caderas próxima a la superficie, sin embargo, en la actualidad los nadadores y expertos abogan por la eficacia de nadar este estilo de forma ondulante, con las caderas más bajas y los hombros fluctuando hacia arriba y hacia adelante, fuera del agua en la fase de respiración. Se trata de una posición más parecida a la posición adoptada en el estilo de mariposa y cuya ventaja consiste en disminuir la resistencia y en aumentar la propulsión.
También es denominado "estilo rana" por la similitud con el nado de estos anfibios.
La braza es el primer estilo que aprenden muchos nadadores ya que es un estilo tranquilo, agradable y el más lento de todos los estilos. Sin embargo, es el estilo cuya técnica cuesta más de dominar, porque requiere una excelente coordinación de movimientos.
A pesar de que es el estilo más lento de los cuatro y uno de los más difíciles de aprender técnicamente, la braza cuenta con algunas características positivas con respecto a otros estilos, algunas de las cuales son:
• Mejor capacidad de orientación visual y auditiva
• Buena posibilidad respiratoria
• Movimientos simétricamente racionales que requieren poca fuerza y una gran autonomía de nado, entre otras.
Como ya se ha dicho, la braza es el más lento de todos los estilos. Esto se debe a que en la etapa final del movimiento de brazos o piernas, la recuperación, se realiza casi en su totalidad bajo el agua, y esto significa un considerable freno o resistencia al avance.
La braza está experimentando cambios de estilo a un ritmo mucho más rápido que los demás. Hasta hace relativamente poco tiempo la braza se nadaba manteniendo el cuerpo más o menos plano (horizontal), con las caderas próxima a la superficie, sin embargo, en la actualidad los nadadores y expertos abogan por la eficacia de nadar este estilo de forma ondulante, con las caderas más bajas y los hombros fluctuando hacia arriba y hacia adelante, fuera del agua en la fase de respiración. Se trata de una posición más parecida a la posición adoptada en el estilo de mariposa y cuya ventaja consiste en disminuir la resistencia y en aumentar la propulsión.